Condenado a 56 años de cárcel

Un vecino de Valdemoro condenado a 59 años de cárcel

Violó a seis mujeres atrayéndolas con falsas ofertas laborales, podría haber agredido a muchas más

Redacción/ Valdemoro Digital

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 59 años de cárcel a un vecino de Valdemoro como culpable de seis delitos de agresión sexual a mujeres en situación de vulnerabilidad a las que atraía a su casa con falsos anuncios de trabajo. Aunque ha sido condenado por seis casos, la Guardia Civil sospecha que podría ser un auténtico depredador sexual y haber agredido sexualmente a otras muchas mujeres, ya que los investigadores se incautaron en su domicilio 9.000 fotos y documentación escaneada de mujeres, en circunstancias similares a las descritas por las mujeres denunciantes.

Fue detenido en enero de 2020, y contaba con antecedentes por ser condenado por abusos sexuales y se encontraba beneficiado de una suspensión judicial en uno de los casos, habría recurrido la sentencia que establece un cumplimiento efectivo máximo de 20 años en prisión.

Según los investigadores, el “modus operandi” era siempre el mismo, las mujeres eran atraídas por un anuncio que el condenado ponía en Internet con ofertas de trabajo para limpiar, ser masajista o para prostituirse. La investigación informa que cuando llegaban a Valdemoro, eran recibidas por el hombre, que alegaba tener su oficina en obras, las invitaba a ir a su casa, donde posteriormente las amenazaba y obligaba a hacerse fotos de carácter sexual y, después, tras agredirlas físicamente, las violaba.

Las agresiones a estas mujeres respondían al mismo patrón, gran necesidad de ganar dinero, porque estaban solas en España, y en algunos casos tenían, bajo su responsabilidad menores de edad.

El condenado, una vez realizada la agresión sexual, las amenazaba con fatales consecuencias si hablaban o denunciaban, porque además él conservaba todos los datos personales de las víctimas. Una de ellas ha contado como tras saber el condenado que estaba en situación irregular le dijo que podría llegar a matarla, meterla en una bolsa y nadie llegaría a saber nada. A otra la acompañó en autobús hasta su casa para saber donde residía. Unas amenazas que funcionaron hasta que una de las víctimas tuvo que acudir al hospital y la Guardia Civil abrió la investigación que terminó con la detención y encarcelamiento preventivo. Fue esto lo que animó a otras cinco mujeres a denunciar haber sido víctimas también de este violador.

El juez instructor relata en la sentencia, como el condenado utilizaba el “engaño de ofertar trabajos inexistentes sabiendo, y aprovechando, el estímulo que suponía para las personas que acudían a la página web en situación de necesidad” y como tuvo una “estrategia de clandestinidad”, utilizando un nombre falso e inventando que su oficina estaba en obras.