Para Proyecto TUD, el Gobierno de Valdemoro es sinónimo de mala gestión

Para Proyecto TUD, el Gobierno de Valdemoro es sinónimo de mala gestión y por tanto exige la dimisión inmediata del actual Alcalde Serafín Faraldos

Ante las acusaciones del actual alcalde sobre la falta de profesionalidad de los funcionarios municipales

Redacción-Comunicado/Valdemoro Digital

TUD ha empujado y sigue haciéndolo tanto como el que más para que el ayuntamiento de Valdemoro disponga de una organización motivada, productiva y enfocada a un objetivo de ciudad del siglo XXI, y no una en la que las colas para el padrón son kilométricas, las calles se mantienen sucias o descuidadas, las infraestructuras olvidadas o en la que el comercio siempre ocupa el último lugar, entre cientos de asuntos por resolver.

Nadie más que TUD ha consolidado una visión del municipio en propuestas concretas que resolverían los problemas estructurales de nuestro ayuntamiento. Ciudadanos en su momento las menospreció abiertamente, y ahora el equipo de gobierno comandado por PSOE, Ganemos e IU, con su Alcalde Serafín Faraldos a la cabeza las ha incumplido sistemáticamente, entendemos que por incompetencia, indolencia o engaño.

Resulta curioso que los dos alcaldes que hemos tenido en esta legislatura, prácticamente tras año o año y medio de gobierno tengan posiciones parecidas en relación al problema del Ayuntamiento, básicamente: “la falta de profesionalidad o incluso de compromiso del personal del Ayuntamiento”, echando de esta forma balones fuera en relación a su incapacidad para gestionar una organización. Primero fue Guillermo Gross, quién se desquitó abiertamente en julio de 2016 identificando este problema como el principal, y hace pocos días Serafín Faraldos, atacando a una gran parte de los empleados y cuestionado sus capacidades o motivaciones a través de los medios públicos.
Es destacable que ninguno de los dos haya hecho lo que deberían ante esos supuestos comportamientos indebidos de los trabajadores o su inadecuado desempeño laboral, cómo sería ejercer las correspondientes acciones disciplinarias a que hubiera lugar, como por ejemplo actuar por la vía administrativa.

¿Son los concejales los que preparan los certificados de padrón u ordenan el tráfico?, ¿son los alcaldes los que elaboran los documentos técnicos que van a pleno en relación a un proceso de remunicipalización?, ¿son los políticos quienes preparan los planes de prevención o redactan las funciones de un catálogo de puestos de trabajo?, ¿son los partidos los que conceden las licencias o los que preparan las órdenes de trabajo para limpiar las calles?. La respuesta es que este ayuntamiento funciona a pesar de sus políticos y sus gobernantes, y sin duda podría funcionar mejor pero con otro gobierno.

Es cierto que los gobiernos anteriores han gestionado de forma irregular la entrada de personal en este ayuntamiento y que no se ha hecho nada posteriormente por regularizar esta situación (sobre todo en la época del PP) y en este aspecto, TUD siempre ha insistido en la necesidad de utilizar la única herramienta legal posible que permite reorganizar el Ayuntamiento, la relación de puestos de trabajo, también llamada RPT y por qué no, debería realizarse sobre la base de una profunda auditoría de Recursos Humanos. Una RPT que insistentemente, tanto Ciudadanos, como ahora la coalición se han negado a realizar de forma sistemática, evitando planificar las acciones, los criterios funcionales o el modelo de ciudad que finalmente determine la organización y sus puestos concretos.

El camino elegido a través de la estabilización, entendemos que legalmente presenta muchas lagunas y que no es posible realizar las bases del concurso sin que éstas se fundamenten en la citada RPT, pues la negociación entre Alcalde y sindicatos en modo alguno podría arrogarse como una competencia que en realidad debería corresponder al pleno y que nos ha dejado absolutamente al margen a la oposición.
Estamos completamente en contra de la caza de brujas que se ha iniciado en este Ayuntamiento y podemos entender que se está constituyendo un auténtico E.R.E. encubierto, no porque no requiera una mejor y más adecuada organización a la legislación vigente, repetimos que no estamos en contra de aplicar la ley, sino porque Serafín Faraldos ha utilizado este momento para desquitar sus inquinas y frustraciones con un Ayuntamiento que requiere una reforma completa. Es como si en una construcción, sólo cambiáramos a los obreros pero siguiéramos ofreciendo la misma mala calidad de las viviendas que se hacen actualmente.

Si la coalición, lo único que puede hacer es esto, sin cumplir con todos los temas que cambiarán realmente nuestro municipio: presupuestos, inventario de bienes, auditoría, RPT, seguimiento de contratos, gestión de la actividad de FCC, y así hasta el total de 48 medidas propuestas por TUD, es que simplemente se debe a su manifiesta incompetencia, una indolencia desesperante o el engaño premeditado, y esto, para TUD, es sinónimo de mala gestión y por tanto de dimisión inmediata.