Confirman los indicios de la caja b del PP

La Audiencia confirma los indicios de la caja b del PP de Madrid e insiste en juzgar a Granados

Según la judicatura “Granados Manipuló y falseó las cuentas electorales”

Redacción/ Valdemoro Digital

El máximo tribunal ha rechazado el recurso de Granados ex número dos de Esperanza Aguirre, ratificando que se debe sentar en el banquillo por la financiación irregular de los populares. Granados tiene abiertas varias causas que van desde las irregularidades en el ayuntamiento de Valdemoro, hasta los delitos que se le atribuyen ya como consejero de la Comunidad de Madrid.

La demoras, a veces justificadas y a veces dilatorias por parte de la defensa del Exalcalde de Valdemoro, están convirtiendo estas causas en una historia sin fin a la que gran parte de la ciudadanía percibe que la intención es lograr la prescripción de los delitos que se le imputan a los acusados en esta macro-causa de la “Púnica” y que finalmente todos los responsables saldrán de “rositas”, esto es muy grave, ya que hace que los ciudadanos perdamos la esperanza en la institución judicial de nuestro país, que se ensaña con los desprotegidos, mientras empatiza con los corruptos.

Es del todo inconcebible, que el Juez encargado de las diferentes causas de la “Púnica” García-Castellón, se haya opuesto sistemáticamente a el enjuiciamiento de los líderes del PP durante el mandato de Esperanza Aguirre, dejando entrever que no realiza su trabajo con la objetividad que se le demandaría a un magistrado en un país democrático como el nuestro. García-Castellón ha rechazado las demandas de la UCO (Guardia Civil) y Fiscalía en numerosas ocasiones para no sentar en el banquillo a los responsables políticos de esta trama de corrupción.

IMPUNIDAD O JUSTICIA

Tras tener bloqueada la renovación del Consejo Superior del Poder Judicial CSPJ por más de 5 años, el PP está logrando su objetivo, que no se produzcan sentencias en las principales causas donde se encuentra comprometido, este “Golpe de Estado” en diferido que están realizando los jueces afines al Partido Popular, a pesar de las advertencias de Europa.

A un ciudadano medianamente esclarecido, la sensación que le queda es que la “Justicia española” trabaja para defender a un partido político y los intereses de los sectores más poderosos de este país y esto es una falla estructural de la democracia, torpedea la línea de flotación de nuestro sistema y la “credibilidad” de nuestras instituciones.

En este aspecto, independientemente del resultado de las elecciones generales del 23 J, el Poder judicial seguirá secuestrado en manos de unos jueces que no obedecen a la Constitución nuestra Ley suprema, sino al mandato del partido político que los colocó en la judicatura.