Cierre de minas de Bitcoin en China

Cierre de minas de Bitcoin en China: una oportunidad de oro para otros países

Redacción Sur Media/ Por: Moris Beracha

Cada vez son más los países que están adoptando el uso del Bitcoin. Sin embargo, China nada a contracorriente: ha emprendido lo que se puede considerar como una ‘cacería de brujas’. No obstante, más allá de lo que está ocurriendo en el gigante asiático, los volúmenes de negociación del criptoactivo a nivel mundial se han mantenido estables. De hecho, su demanda se fortalece día tras día.

El 24 de septiembre del año pasado, el Banco Central de China anunció que todas las transacciones financieras con divisas digitales eran ilegales, lo que representaba una nueva medida regulatoria contra este tipo de comercio. Para ‘justificar’ la decisión, el ente emisor indicó en un comunicado que “las actividades comerciales vinculadas con monedas virtuales ponen en grave peligro la propiedad de los ciudadanos”.

Pero lo cierto es que el cierre de la minería de Bitcoin en China ha tenido un impacto nulo en el funcionamiento del también llamado “oro digital”, salvo por algunos bloques que han tardado más en generarse. Incluso, en medio de ese leve retraso la red ha funcionado bien y sin problemas.

Tan es así que el ecosistema minero de Bitcoin demostró en 2021 que crece y se fortalece. Esto después de resistir y reponerse al ataque de la prohibición de la minería digital. Y es que el sistema de defensa de este criptoactivo es robusto y proporciona una base confiable de procesamiento.

Quién se lo pierde es China. Michael Saylor, CEO de MicroStrategy, calculó que dejarán de ingresar a ese país, por su política antiminería, hasta 1 billón de dólares anuales. Periodistas como Colin Wu han publicado en Twitter que esto también supondrá pérdidas para ciertas plantas de generación de electricidad. Algunas hidroeléctricas desperdiciarán buena parte de la energía generada, la cual ahora no tendrá ningún uso.

Así que la prohibición de la minería de Bitcoin en China representa una oportunidad de oro para América Latina, Estados Unidos y Europa, como ya se está demostrando. Esta actividad se ha ido desplazando hacia la nación norteamericana, principalmente Florida y Texas, y a Canadá.

También se está moviendo hacia Europa Occidental, Kazajistán, Asia Central y América Latina. En El Salvador, por ejemplo, existe un “plan para ofrecer instalaciones para minar Bitcoin con energía muy barata, 100% limpia, 100% renovable y con cero emisiones, aprovechando la actividad volcánica”, como lo ha señalado el presidente Nayib Bukele.

En Paraguay el Senado aprobó un proyecto de ley, aunque todavía debe ser aprobado en la Cámara de Diputados y luego reglamentada por el Poder Ejecutivo, que cataloga a la minería digital como una “industria digital innovadora”, plausible de recibir los incentivos que otorga el Gobierno para tales fines.

Según el portal CriptoNoticias, la energía barata y abundante de Paraguay hace de la minería de criptomonedas una actividad rentable en ese país. Sin embargo, medios paraguayos destacan que los entes reguladores todavía no le han dado luz verde a la normativa, por lo que habrá que seguir esperando.

“Costa Rica tiene energía en abundancia”, ha dicho, por su parte, Eduardo Cooper, presidente de la empresa familiar propietaria de la finca Data Center CR, donde minan Bitcoin alimentada por una planta hidroeléctrica. También aseguró que las empresas mineras internacionales buscan energía limpia y barata y una conexión a Internet estable, lo que ese país ofrece en abundancia.

Como se puede ver, la intención China de cerrar el comercio y la minería de bitcoins no ha ‘minado’ la actividad. Todo lo contario, el mercado ha seguido operando a través de transacciones en el extranjero. Y, definitivamente, lo continuará haciendo.